Aproveché la tempestad para levantarme y cerrar ventanas y puertas y bajé para prepararme algo para comer. Mi biopsia pulmonar es hoy a las 12h30 en el Hospital Zambrano y tengo que hacer ayuno de 8 horas, así que no me pareció nada mal comer alguna cosa a las 2 de la madrugada! 😂
INSIGHTS NOCTURNOS
Mientras comia una sincronizada en la oscuridad de la noche me quedé pensando... Por qué no me gusta el Hospital Zambrano? Y la respuesta a una pregunta que me ha martillado la mente desde que hice el body talk con mi queridísima Dra. Elayne, apareció de la nada: tuve mismo miedo de morir 🥵😥 ! Pero no fue culpa del cáncer...
En la sesión de Body Talk semana pasada, Dra. Elayne me comentó que es muy común aparecer nódulos en los pulmones en un cáncer de seno metastásico. Según la medicina chinesa, el pulmón regula la emoción de luto y el pesar, o sea, está relacionado con el miedo de la muerte. El miedo no hace parte de mi diccionario y a mi se me hizo raro que yo tuviera miedo de morir, pero si realmente pasó.
La única vez que tuve miedo de morir en mi vida fue exactamente hace 14 meses, cuando me despiertan de las cirurgias de 9 horas - mastectomia, abdominoplastia y reconstrucción de seno - y me abandonan (no hay otro término para lo que me hicieron en mi pós-operatorio en el Hospital Zambrano) - con mucho dolor en el lado izquierdo de mi cuerpo porque me dieron anestesia de menos, una reacción a la morfina con asombrosas e ininterruptas contracciones musculares involuntarias seguidas de hipotermia y, para ayudar, un dolor estúpido en el brazo y codo derechos porque me quedé inmóvil las 9 horas que duraron las cirugías. Y pasmen: la única enfermera que estaba en el pós-operatorio no pensaba en hacer nada porque según ella “ya me habían ministrado morfina suficiente”. Solo porque le imploré que hablara al doctor Eduardo Guzmán fue que la responsable por el pós-operatorio me administrara un poco más de morfina, me cubriera el cuerpo con una manta porque sentía que iba a desfalecer con los fuertes escalofríos que no cesaban y aparecieron dos otros enfermeros para hacerme un masaje en el brazo derecho que dolía horrible.
Bingo! Sí, toda cortada del abdomen al tórax y sin atención después de la cirugía, sentí que iba a morirme.
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