En la víspera de la cirugía alrededor de las 6:00 de la tarde apenas conseguía la carta pase enel seguro para la reconstrucción de mama. Todavía fue a buscar mi marido en el trabajo y en la noche discutimos sobre los valores que la carta pase mostraba. Dormí muy mal la noche porque estaba asustada y al mismo tiempo ansiosa con lo de la cirugía.
Por fin la alarma sonó. Y rápidamente estaba lista para ir al hospital. Nos tardamos un poquito para salir pero alcanzamos llegar al hospital a las 7:30. Ya andaba preocupada por que los cirujanos me habían pedido para llegar antes de las siete. Apurados, fuímos a la Área de admisión y después de todo el papeleo para ingresar a cirugía voy a radiología para que me inyectaron un radiofármaco en la mama. Sí, otro rádio… ahora par los Ganglios Centinela.
Ese radiofármaco ayudaria a los médicos a detectar si había un ganglio de la axila infectado. De radiologia me llevaron a la sala de pre-operatorio y ahí me quedé hasta las 11:30 casi 12 porque la cirugía de la paciente de Eduardo llegó atrasada y se retrasó mi cirugía…
Eran casi 12 del día cuando empezaron los procedimientos. Ya en la sala de cirugía, me desinfectaron todo el cuerpo y ahí me tenían completamente desnuda enfrente de todos. Me sentí en un campo de concentración... y me acuerdo de decirlo en voz alta.
Luego me pidieron para que me acostara de de lado y desde entonces no me acuerdo de nada.
Un pos-operatorio de perros 😩😫😖
Nueve o diez horas después, me despertaron, pero no vi nada, ni nadie. De la nada, empecé a sentir un dolor muy fuerte del lado izquierdo del abdomen. Era como si no me hubieran anestesiado y el dolor crecía a pasos gigantes. Al mismo tiempo, tenia un dolor increíble en los brazos y, para ayudar, mi cuerpo entero empezó a temblar de frío. Mucho estrese en este momento…
Yo escuchaba a la enfermera decirme que si yo quisiera ella podría llamar a mi esposo para calmarme. Mi marido estuvo todo el tiempo afuera esperándome ❤️❤️❤️. A pesar de todo el dolor, un momento de lucidez me asaltó y le dice a la enfermera “si yo estoy asustada con todo lo que me está pasando, porque voy asustar a mi esposo?”.
La enfermera del pos-operatorio no sabia qué hacer… Según ella, ya no podía ministrarme más morfina, porque ya me habían puesto mucha. Y la escuchaba hacer una y otra llamada a los médicos pero todas la mandaban a buzón. Y yo seguía sintiendo dolor y temblando horriblemente. Me acuerdo de que un enfermero pasó por allá y me dijo que para alivianar el dolor de codos yo tenia que moverlos tantito y aconsejó a la enfermera a taparme con una cobija para detener la hipotermia. Empecé a moverlos hasta sentir que mis brazos hormigueaban. Pero el dolor lancinante, punzante y cortante del lado izquierdo del abdomen ahí seguía y para nada me calmaba...
En medio de tanto dolor, me acordé de decir a la enfermera que llamara al doctor Eduardo, que él le contestaría su llamada. Y unos minutos después ya me estaban administrando otra dosis de morfina.
Cuando todo se calmó, me subieron a la habitación y ahí estaba esperando mi esposo. Me acuerdo de haberle comentado que los médicos cuidaran muy bien el pre-operatorio pero olvidaron del pós-operatorio… 😳😨

1 comentario:
Te comprendo.. Lo del terrible dolor y el cuerpo brincando en la camilla del frío, también me sucedió.. Comencé a orar.. Pensé que eran mis últimos minutos en este mundo ��.. Luego me administraron más morfina y me dolió muchísimo, sentía como recorría mis venas.. Pero unos minutos después.. Ohh sorpresa... Yo misma me dije: sobreviví!!! Gracias Dios...
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